Ayer comencé a leer un libro que se llama “El camino al carácter” de un periodista llamado Dave Brooks. En él compara aquellas virtudes que son “para el CV” versus las que son para “elogios”, o más claro, lo que dirían de ti en un funeral.
Al parecer, David plantea que para desarrollar unas virtudes, se deben perseguir ciertas acciones y objetivos que son contrarios a los que se deberían perseguir para desarrollar las otras. Por ejemplo: la humildad va en contraposición al “autobombo” que en muchos trabajos es clave para obtener mejores posiciones.
Si bien no te puedo comentar mucho del libro dado que recién voy partiendo, me aventuraré a decir que es difícil enfocarse en las virtudes elogiables porque estamos inmersos al menos 8 horas al día en trabajos que en su mayoría valoran las virtudes curriculares.
A pesar de que también estamos 8 horas haciendo otra cosa (y las restantes teóricamente durmiendo), las que más valoramos son las horas de trabajo.
Digo esto porque si te preguntan quién eres, ¿cuál de éstas es tu respuesta habitual?
Camila, dentista de la U. XX (pergaminos académicos)
Andrea, gerente de marketing de YY (trabajo)
Pedro, el mayor de dos hermanos (familia)
Francisco, fanático del fútbol (hobbies) (mío no)
Es posible que deberíamos contestar todas esas juntas de alguna forma y aún así, esbozaríamos sólo una parte de lo que nos identifica como persona.
Sin embargo, la respuesta siempre recae en un mix entre el punto 1 y 2.
Por eso digo que es lo que más valoramos: es posible que sea en lo que más pensamos durante el día y a lo que le dedicamos las horas más valiosas del día. Es ese pedazo de tiempo que incluso, nos lleva a estudiar y mejorar en las horas que no son laborables para ser más eficiente en las laborables.
No hay que desconocer el hecho de que el trabajo permite mantenerte el resto del tiempo cubriendo tus necesidades, comodidades e imprevistos.
Incluso, dependiendo del filósofo que leas, podrías verlo como que:
El trabajo es la realización del ser - Froncois Dagognet
El trabajo dignifica al hombre - Karl Marx
El trabajo aleja tres grandes males: el aburrimiento, el vicio y la necesidad - Voltaire
Y por esas razones no sería tan loco pensar que sea gran parte de tu día y busques optimizar y ser mejor en eso.
Aunque claro, también hay definiciones más cínicas:
El trabajo es el refugio de los que no tienen nada que hacer - Oscar Wilde
Ya he mencionado en otra reflexión, el estudio de Harvard que lleva 85 años siguiendo a los participantes y sus familias, llegando a la fuerte correlación que tienen las buenas relaciones (familia/amigos) con la felicidad y la salud.
La mayoría de las religiones, apunta también a cultivar valores relacionados con la humildad, caridad, solidaridad, etc. No con el liderazgo, la proactividad, ser orientado a objetivos o ser innovador.
Posiblemente preferiríamos rodearnos de amigos solidarios que proactivos.
Por casualidad, el viernes vi cómo se despedía una persona en el chat del trabajo y las amorosas palabras que recibió en respuesta de todo el equipo.
No pude evitar pensar que al final una buena disposición, ser buen compañero, apoyar a quien lo necesita, puede ser bastante más valioso que agendar una reunión efectiva o mejorar una presentación.
¿Qué haces para mejorar en tu trabajo?
¿Qué haces para mejorar tu relación con tu familia/amigos?
¿Qué haces para mejorarte?
Recursos
Artículo: ¿Por qué el trabajo dignifica a las personas?, Fundación Adecco.
Artículo: Disquisiciones Educativas, Viva la Ciudadanía.
Libro: Cándido, de Voltaire.
Libro: El crítico artista, de Oscar Wilde.
Libro: Una buena vida, de Marc Schulz y Robert Waldinger.